Kalimera

Con el genuino deseo de un poco de agua de mar, llegamos a las azules costas del mar Egeo, en Grecia. Absorbiendo sol, espuma de mar y cerveza helada comenzamos a navegar por los mares que gavillas de años atrás surcaron navíos en una u otra dirección con los míticos Aquiles, Hector y sus descendientes bien pertrechados en la proa. La dirección: Skiatos, una preciosa isla cubierta por bosque mediterráneo y piedras que lanzan reflejos debido a restos de mármol y pirita, dándole al paisaje un toque de filosófico glamour. Sus playas de agua cristalina ataviadas con arena fina o blancas y pulidas piedras. El pueblo es pequeño pero lleno de personalidad con sus típicas casas blancas de ventanas azules y sus calles tipo laberinto que te hacen olvidar la rutina. 

Sentado aquí a la orilla de la playa con el mar enfrente dan ganas de dejarlo todo, poner una palapa en la playa y vivir así...simple

Primera parte de tres